PLAYA DEL CARMEN, Q.ROO, 30 de marzo.- El sector de los pequeños hoteleros de la zona centro de Playa del Carmen denunció que los problemas de ruido de los centros nocturnos y la presencia del comercio ambulante se han vuelto una constante en la localidad, todo ello a pesar de que en los últimos dos años han sostenido reuniones con el gobierno municipal para buscar soluciones y en el cual si bien los han escuchado, no han ejecutado acciones concretas.
Así lo expresaron los integrantes de la Asociación de Pequeños Hoteleros del Centro, cuya presidente Fabiola Vélez, lamentó que en dos años de juntas con autoridades municipales, hasta el momento el problema del excesivo ruido en la zona turística y el ambulantaje persistan hasta este momento, lo que ya comenzó a causar repercusiones en agravio no solo de los pequeños centros de hospedaje, sino de establecimientos de otros giros.
En una conferencia de prensa que los integrantes de esta asociación sostuvieron este mediodía con representantes de los medios de comunicación, la empresaria dijo que una muestra de que esta problemática ya comenzó a afectar al destino, son las constantes quejas de parte de los propios huéspedes debido al elevado número de decibeles en antros y lugares de recreación nocturna, y aun cuando esta problemática se ha expuesto en varias ocasiones a la dirección de Medio Ambiente, dicha dependencia no ha intervenido para ponerles un alto.
Actualmente el número límite permitido es de 60 decibeles, sin embargo, es por demás evidente que esos niveles son sobrepasados, sostuvo la dirigente hotelera.
“Hemos expuesto esta problemática a las autoridades del gobierno, si bien si nos escuchan, pero no actúan. Apenas ayer sostuvimos otra reunión y el director de fiscalización nos comentó que no pueden clausurar. Nosotros no estamos en contra de nadie, pero es claro que nuestros huéspedes quieren descansar y les es imposible por el alto ruido generado por la música que se escucha a varias calles de distancia”.
Por su parte, Víctor Bona, Presidente de la Asociación de Rentas Vacacionales, señaló que han tenido que invertir recursos en colocar cristales dobles en las habitaciones de los hoteles para evitar se escuche el alto ruido, a pesar de ello, aun alcanza a filtrarse.
Fabiola Vélez dijo que en tramos de la Décima Avenida desde la calle 6 hasta la calle 14 norte, alcanza a escucharse el elevado ruido de la música, aunque en otros tramos como el de la calle 38 con Quinta Avenida también prevalece este problema del ruido que incluso se prolonga hasta las seis de la mañana.
En cuanto al ambulantaje, se sugirió crear una zona determinada para que quienes se dedican a esta actividad puedan vender sus productos y con ello, cuidar la imagen del destino.
Algunos empresarios hoteleros han referido que este problema ha generado que hoy por hoy, Playa del Carmen ya no sea visto como un destino de descanso y relajación, por lo que ha pasado a convertirse en un destino de fiesta, mientras que aquellos visitantes que buscan alejarse del bullicio han optado por otras opciones como Tulum y la Riviera Maya.
Esta situación -dijeron-, los ha obligado a disminuir sus tarifas hasta en un 50 por ciento, por lo que aunado a otros aspectos como la pandemia y la inseguridad, el panorama se ha tornado complicado para ellos.
